¿Cuáles son los 4 riesgos comunes en la cadena logística?

¿Cuáles son los principales riesgos en la cadena logística?

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La más reciente disrupción a gran escala causada por el covid-19, ha puesto en evidencia la fragilidad y los retos de la cadena de suministro.

¿Quién podría imaginarse que a principios de este año el panorama de compañías, comunidades y países enteros daría un giro de 180° por cuenta de una pandemia? Lo más probable es que durante la planeación estratégica de tu compañía para el año 2020 existieran diferentes objetivos a alcanzar, y en ninguno de ellos estuviera contemplada una disrupción de este calibre.

cadena logística segura

Este escenario se replicó en múltiples compañías, en diferentes industrias y a lo largo de diferentes países, y la industria logística no fue la excepción. La propagación del covid-19 puso en evidencia la falta de resiliencia de las cadenas de suministro globales, tradicionalmente caracterizadas por reunir a diferentes intermediarios que están expuestos a constantes estímulos internos o externos, y que, aun así, no saben cómo prepararse de forma óptima para hacerles frente.

Por esta razón, ha cobrado vital importancia el tema de planear estratégicamente contemplando riesgos en logística, fallas y disrupciones, para así identificar oportunamente retos y oportunidades de mejora en el proceso de planeación, abastecimiento y distribución de la carga.

1. Falta de visibilidad y trazabilidad en la cadena de suministro

Hay una verdad universal que a pesar de ser simple no es fácil de aplicar: «Lo que no se mide no se puede mejorar». En términos de la cadena logística, este principio hace alusión a la visibilidad y trazabilidad.

La visibilidad en la cadena de suministro es el elemento que permite trazar, monitorear y obtener información relevante y en tiempo real a lo largo de todo el proceso logístico, proporcionando agilidad y capacidad de respuesta.

Uno de los errores más frecuentes en la cadena logística es que los procesos son gestionados de forma aislada, desconectada e independiente. Esta fragmentación de la información genera fricciones entre la compañía, sus proveedores y clientes finales, pues impide identificar oportunamente deficiencias operacionales, entorpece la capacidad de respuesta al cliente y limita la posibilidad de hacer frente a riesgos imprevistos.

cadena logística ideal

¿Cómo evitar o resolver la falta de visibilidad en la cadena de suministro?

Hoy en día existen diferentes alternativas tecnológicas que permiten hacer frente a estas limitaciones y retos. Es importante que determines cuál de estas soluciones se adapta a las necesidades y metas de tu compañía. Puedes elegir entre servicios en la nube, dispositivos móviles o soluciones a partir del internet de las cosas (ioT).

Adicional a la implementación de soluciones tecnológicas, es importante construir relaciones de confianza y promover la comunicación y colaboración en tiempo real entre los diferentes participantes de la cadena de suministro, es decir, tanto equipos internos, proveedores externos y clientes.

Haciendo uso de dichas herramientas tecnológicas y el análisis profundo de los datos generados, obtendrás visibilidad de tu cadena de suministro. Esta nueva capacidad le concederá a tu compañía flexibilidad y la posibilidad de generar información relevante y oportuna, lo que trae consigo beneficios como:

  • Reducción del inventario.
  • Disminución de costos y/o maximización de beneficios.
  • Incremento en la velocidad de llegada al mercado.
  • Previsión de aumentos en la demanda o cualquier otro tipo de fluctuaciones en el comportamiento del consumidor que puedan afectar las operaciones presentes o futuras del negocio.
  • Capacidad de manejar de mejor forma los riesgos.
  • Mejora en la capacidad de respuesta a los clientes, a través de la calidad y claridad en el servicio.
2. Implementación de estrategias erradas para gestionar costos.

Una inadecuada gestión de los costos y gastos de tu compañía puede causar que estos se conviertan en un dolor de cabeza recurrente, al consumir una gran proporción de los ingresos y reducir visiblemente las ganancias de tu negocio.

A medida que tu compañía crece, puede tornarse más complicada la pregunta de “¿dónde debo reducir costos?”, pues con el tiempo notarás que has reducido en las etapas del proceso y elementos más visibles y obvios, de modo que será más difícil determinar en qué etapas es posible aplicar reducciones adicionales.

¿La solución? Pregúntate cuántas veces está siendo intervenido tu producto, es decir, cuántas veces es manipulado tu producto desde el momento que sale de tu bodega o la bodega de tu proveedor, hasta que llega a manos del cliente final. Este proceso puede verse algo similar al siguiente ejemplo:

proceso-Skholl-cadena-de-suministro

La lista sigue y puede ser muy extensa dependiendo del tipo de transporte que elijas para tu mercancía y los tipos de intermediarios logísticos que manipularán tu carga entre terminales, puertos, mayoristas, etc.

Te preguntarás por qué esto es importante en términos de costos. La respuesta es porque cada vez que tu producto es manipulado, estás incurriendo en costos: Costos de equipo, mano de obra, riesgos de daño, entre otros.

Pregúntate si puedes eliminar pasos innecesarios, por ejemplo:

  • Enviando directamente el producto desde la bodega de tu proveedor a tu retailer para así no incurrir en gastos de bodegaje (en caso de que esta alternativa aplique a tu modelo de negocio).
  • Incorporando tecnología que permita agilizar el proceso de cargue y descargue, como es el caso de sistemas Ro-Ro (Roll on – Roll Off) que permiten descargar decenas de pallets en un solo movimiento.
  • Estandarizando y gestionando el tamaño de las ordenes de tus clientes, para no manipular piezas individuales, es decir, en lugar de manipular cada unidad de tu producto, revisa si puedes manipular empaques más grandes, como cajas, o pallets completos.

3. Riesgo cibernético

Desafortunadamente, la mayoría de compañías involucradas en la industria logística carecen de redes tecnológicas seguras, lo que implica que tienen grandes brechas en ciberseguridad que las dejan expuestas a ataques maliciosos por parte de hackers.

Los ciberataques en la cadena de suministro tienen repercusiones negativas a corto, mediano y largo plazo:

  • Pérdida de información externa: Los ciberdelincuentes acceden a información sensible y confidencial de clientes o usuarios.
  • Pérdida de información interna: Información confidencial e imprescindible en la actividad diaria de la compañía.
  • Reputación. Si un usuario sufre el robo de sus datos en una plataforma externa, difícilmente volverá a confiar en esta compañía.
  • Sanciones: Regulaciones como el GDPR (General Data Protection Regulation) establecen altas sanciones económicas en caso de robo de datos personales.

¿Cómo hacer frente al riesgo cibernético?

  • Es necesario que tu compañía establezca sólidos protocolos de seguridad informática.
  • Limita el número de personas que tiene acceso a información confidencial, o al código de tus plataformas y sistemas. Esto es particularmente importante si trabajas con terceros o entidades que entran en contacto con tu software, pues usualmente este tipo de ciberataques se generan a través de la introducción de códigos maliciosos en el proceso de desarrollo del software.
  • Es importante que los empleados de tu compañía eviten utilizar redes desconocidas para acceder a información sensible de la organización.

4. Falta de una estrategia adecuada para la gestión del riesgo.

Al principio de esta guía planteamos un escenario que se ha hecho evidente tras la contingencia del covid-19: La mayoría de las compañías carecen de una estrategia de gestión del riesgo adecuada para mitigar disrupciones de esta magnitud sobre su cadena de suministro, lo cual limita su capacidad para orientarse con resiliencia y flexibilidad.

Aunque el COVID-19 es el ejemplo más reciente y de efectos más resonantes, la recurrencia de pandemias de este alcance no es tan común, razón por la cual muchas compañías omiten este elemento al elaborar sus planes de gestión del riesgo.

Podríamos pensar que esto se debe a la periodicidad limitada de este tipo de eventos, sin embargo, existen a diario muchos sucesos que suponen un riesgo a lo largo de la cadena logística: Desastres naturales (tormentas, huracanes), fallas tecnológicas u operativas, riesgos de robo, pérdida o faltantes, accidentes o daños sobre la mercancía, y a pesar de todo lo anterior, aún hoy muchas compañías no protegen su mercancía adecuadamente.

seguro frente huracanes

La pregunta es: ¿Si tu carga está expuesta a innumerables riesgos a lo largo de la cadena de suministro, por qué no has tomado medidas? Muchas compañías optan por ignorar el riesgo, pero hacerlo no hará que desaparezca.

¿Cómo gestionar el riesgo en la cadena logística?

Asegurar tu carga es la mejor forma de protegerla contra los riesgos inherentes al transporte y demás procesos en la cadena logística que implican manipulación de la mercancía.

Los accidentes, robos de carga y daños de la mercancía son tan comunes que una forma estratégica de abordar el tema es asumir que tu carga siempre está en riesgo. Por la naturaleza de estos riesgos, es sencillamente imposible evitarlos o prever con exactitud cuando se presentarán, por esta razón es importante preparar a tu compañía para hacer frente a estos imprevistos y el seguro de carga te ofrece esta habilidad.

Un elemento que puede generar confusión es el hecho de que el seguro de carga no es obligatorio, y por esta razón algunas compañías consideran, erróneamente, que adquirirlo es un gasto, cuando en realidad es una inversión que genera altos rendimientos. Para ilustrarlo mejor, hemos diseñado el siguiente paralelo que muestra los beneficios que trae consigo el seguro de carga:

Paralelo de seguro sin seguro

En conclusión, ten presente que un plan adecuado de gestión del riesgo, la protección contra el riesgo cibernético, la implementación de estrategias adecuadas para la gestión de gastos y la adopción de herramientas y procesos que den visibilidad en tu cadena de suministros, dotarán a tu compañía con herramientas para salvaguardar a tus empleados, mitigar la exposición financiera y operacional, dar continuidad a tus productos y servicios más críticos y así, continuar entregando soluciones a tus clientes.